La Guardia Civil incumple su promesa a Españabola de ayudar a dos señoras de 86 años atrapadas en casa, tras haberles impedido acceder a la zona: “Ni las han contactado”
La ineficiencia de la respuesta institucional y la falta de apoyo en el reciente episodio de gota fría en Valencia, ha vuelto a poner en evidencia las carencias de las administraciones tanto a nivel autonómico como estatal. Según ha denunciado públicamente la cuenta de redes sociales Españabola, dos mujeres de 86 años llevan días atrapadas en sus hogares en Catarroja, sin poder salir para abastecerse de alimentos ni agua, y a pesar de múltiples intentos por brindarles asistencia, los esfuerzos han sido en vano debido a una gestión deficiente y un bloqueo institucional.
“Hay dos señoras de 86 años en Catarroja a las que intentamos llevarles comida y agua directamente ayer. Tienen hambre y no pueden salir de casa. No nos dejaron acceder a su zona, la GC nos pidió dirección y teléfono para que se lo llevara protección civil”, denunció Españabola a través de Twitter. Esta situación, además de ser preocupante, pone de relieve la aparente falta de coordinación entre la Guardia Civil, Protección Civil y el resto de instituciones responsables de la seguridad y el bienestar de los ciudadanos en momentos de emergencia.
Lejos de resolverse, el problema ha sido aún más grave debido a la ausencia de respuesta efectiva de parte de las autoridades. Según añadió Españabola, la Guardia Civil solicitó los datos necesarios de las mujeres para que el equipo de Protección Civil pudiera asistirlas, pero finalmente ninguna ayuda llegó a las afectadas: “Las he llamado y por ahí no ha pasado nadie. Ni las han contactado”, añadió en su mensaje. Este grave fallo no solo deja a las dos ancianas desamparadas, sino que también pone en duda la fiabilidad de las administraciones para actuar de manera rápida y eficiente en situaciones de emergencia.
La respuesta insuficiente del gobierno autonómico de Carlos Mazón y la falta de acciones a nivel estatal por parte del Gobierno de Pedro Sánchez reflejan una grave negligencia que afecta a los ciudadanos en momentos críticos. La comunidad ha comenzado a cuestionar la capacidad y compromiso de las instituciones responsables, y esta denuncia ha generado indignación y exigencias de responsabilidad hacia las autoridades implicadas. La situación reclama, además, una investigación urgente y explicaciones claras sobre las fallas operativas y organizativas que han dejado a estas personas en un estado de vulnerabilidad intolerable.
No puede ser que un chaval de 26 años pueda y una administración que recauda 200.000 millones de euros al año no. No puede ser que unos zoomers organizados puedan y el Gobierno de la decimocuarta economía del mundo no. No puede ser.