La UCO está cerca de desencriptar un disco duro y dos pendrives de Ábalos que amenazan al Gobierno de Pedro Sánchez: «Lo que hay es muy gordo» |

La UCO está cerca de desencriptar un disco duro y dos pendrives de Ábalos que amenazan al Gobierno de Pedro Sánchez: «Lo que hay es muy gordo»

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil está cerca de desencriptar un disco duro y dos pendrives que pertenecen al exministro José Luis Ábalos. Según informa Alejandro Entrambasaguas, periodista de El Debate, estos dispositivos fueron confiscados en la residencia de Koldo García, asesor de Ábalos, durante una investigación. En el momento de la incautación, García declaró a los agentes: «Lo que hay dentro es muy importante y no podrán desencriptarlo». Mientras tanto, Ábalos ha solicitado a la Audiencia Nacional que le devuelvan los dispositivos, argumentando que contienen información de carácter «privado y personalísimo».

Los dispositivos fueron encontrados el pasado 21 de febrero en la casa de Koldo en Benidorm, en una funda similar a un estuche para zapatos, durante los últimos momentos del registro. Al notar el interés de los agentes por el contenido de la bolsa oscura, García reaccionó nervioso, diciendo: «Eso no es mío, es de Ábalos», y añadió: «Lo que hay dentro es muy importante y está encriptado. No podrán abrirlo». Los investigadores sellaron los dispositivos en una bolsa transparente y abandonaron la vivienda.

Durante los últimos ocho meses, la UCO ha estado trabajando en el análisis de estos dispositivos. Fuentes cercanas a la investigación han revelado que la apertura de los mismos es inminente, y que el material podría incluir grabaciones y documentos sensibles. Desde que Ábalos solicitó la devolución de estos dispositivos, ha reducido significativamente sus apariciones públicas en televisión. Tras su salida del programa Todo es mentira de Cuatro, afirmó: «Voy a seguir luchando por mi inocencia».

El 31 de julio, su defensa presentó un escrito a la Audiencia Nacional explicando que, tras su destitución como ministro, hizo copias de los datos de su ordenador personal, que ahora están almacenados en los dispositivos incautados. Según el escrito, dicha información es de carácter «absolutamente privado y personalísimo», y no tiene relación con la investigación en curso. También se indica que Koldo fue quien guardó estos soportes en su domicilio, sin detallar los motivos. Ábalos sostiene que los dispositivos contienen tanto documentos personales como laborales.

Mientras sigue solicitando la devolución de los dispositivos por razones de privacidad, Ábalos también expresa su preocupación de que la información contenida en ellos pueda ser filtrada al público. Afirma que tal filtración vulneraría su derecho a la privacidad y a la protección de sus datos personales. Paralelamente, la UCO continúa analizando los mensajes y archivos telefónicos de otros miembros implicados en la trama, que serán entregados próximamente al juez Ismael Moreno.

En paralelo, El Debate ha informado de la implicación de dos nuevos altos cargos del Gobierno en los contactos con la trama: Pedro Saura, actual presidente de Correos, y Bartolomé Lora, vicepresidente de la SEPI, organismo dependiente del Ministerio de Hacienda. Los investigadores han presentado pruebas de que ambos se pusieron en contacto con Javier Hidalgo, CEO de Air Europa, meses antes de que el Consejo de Ministros aprobara el rescate de 475 millones de euros para la aerolínea.

Los agentes interceptaron una conversación de WhatsApp entre Ábalos y el empresario Víctor de Aldama, en la que este último le solicitaba que llamara a Hidalgo para tranquilizarlo debido a su nerviosismo. En la conversación, Aldama pide a Ábalos: «¿Puedes llamar a Hidalgo? Nadie le dice nada y está preocupado». Ábalos respondió que le habían informado de que lo llamarían esa mañana, a lo que Aldama insistió: «No lo han llamado aún. Mira a ver si puedes hacer algo». El exministro, tras la insistencia, contactó con Pedro Saura para que hablara con Hidalgo, confirmando luego a Aldama que ya le había pedido a Saura que lo llamara. Aldama le agradeció la gestión con un «Ok, gracias». Además, Ábalos reenvió a Aldama un mensaje de Bartolomé Lora, vicepresidente de la SEPI, confirmando la tramitación del rescate.

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