San Sebastián, Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca y Bilbao, las ciudades más caras: Comprar un piso de 80 m2 en Donosti cuesta de media casi 450.000€
La crisis de la vivienda en España ha alcanzado niveles insostenibles, especialmente para los jóvenes que buscan convertirse en propietarios. Un claro ejemplo es Madrid, donde el precio medio de un piso de 80 m² ya supera los 380.000 €, lo que representa un aumento de casi 60.000 € en solo un año. En otras ciudades, la situación no es mucho mejor: capitales como Málaga, Valencia, Alicante, Santander y Granada han visto aumentos de más del 15% en los últimos 12 meses, exacerbando el acceso a la propiedad.
La raíz de esta crisis es una combinación de factores que no muestran signos de alivio. La oferta de vivienda sigue disminuyendo, tanto en la reposición de viviendas usadas como en la construcción de obra nueva. A esto se suman políticas que, en lugar de aumentar la oferta, parecen haber reducido la disponibilidad de inmuebles, como lo han señalado expertos del sector inmobiliario. Este fenómeno ha creado un escenario en el que los precios no solo no bajan, sino que siguen subiendo sin freno.
El impacto de estos aumentos es especialmente devastador para los jóvenes y las familias que aún no cuentan con una propiedad. Con la financiación bancaria cada vez más restrictiva debido al alza de los tipos de interés, muchos jóvenes se enfrentan a la realidad de quedar atrapados en el alquiler de por vida. En algunos mercados, como el de Madrid, Barcelona o el arco mediterráneo, los precios ya están en niveles tan elevados que resulta casi imposible acceder a una vivienda sin un patrimonio previo o ingresos significativamente altos.
A pesar de la creciente demanda, las respuestas gubernamentales han sido insuficientes. Más bien, han sido un tiro en el pie. La Ley de Vivienda, que sobre el papel buscaba proteger a los inquilinos y controlar los alquileres, ha sido criticada por su efecto adverso en el mercado, reduciendo la oferta aún más y fomentando una subida de precios tanto en el alquiler como en la compra. Si no se implementan soluciones estructurales que aumenten la oferta y mejoren el acceso a la financiación, las perspectivas para los futuros compradores son sombrías.
Las cinco ciudades más caras de España
Las cinco ciudades más caras para comprar vivienda en España han experimentado subidas de precios alarmantes en el último año. San Sebastián, históricamente la más costosa, mantiene un precio medio por metro cuadrado de alrededor de 5.570 €, lo que sigue alejando a muchos compradores. Madrid ha alcanzado los 4.756 €/m², con incrementos que rondan el 15% en zonas clave como Salamanca y Chamberí.
En Barcelona, los precios están en torno a los 4.561 €/m², impulsados por la elevada demanda internacional y la escasez de oferta. Palma de Mallorca sigue la tendencia con un precio medio de 4.308 €/m², influenciado por la presión del mercado turístico. Finalmente, Bilbao ha visto una subida significativa, con precios que alcanzan los 3.384 €/m². Málaga, que por poco no entra en el Top 5, es una de las capitales en las que más ha subido el precio. Estos datos reflejan la creciente inaccesibilidad de la vivienda en las principales ciudades españolas, donde cada vez es más difícil para los residentes locales adquirir una propiedad.
