NADA QUE CELEBRAR
Artículo escrito por Javi Martínez Onsalo (Twitter)
Hoy es el día de la constitución, y seguramente verás a mucha gente que ha sido engañada celebrándolo como yo mismo habría hecho hace años… antes de madurar y entender lo que de verdad es este día
Y es que no hay NADA QUE CELEBRAR
Porque para que viva España, debe morir el 78
Y os explico por qué:
El mito de la transición y el “logro de la constitución española” llevan siendo un tema intocable mucho tiempo. El que se opusiera a ella se estaba oponiendo a esa figura imaginaria del consenso y el entendimiento que simbolizan la transición y que nos llevan enseñando 40 años que es lo más de lo más.
Nos han dicho que el “café para todos” fue algo positivo, y han adornado toda el relato que lo envuelve de valores incuestionables e inatacables… y es que como te va a parecer mal que las personas que piensan distinto lleguen a un acuerdo, eres un extremista!
Pues nada más lejos de la realidad posiblemente lo sea, pero es que visto lo visto no cabe otra manera de ser cuando vemos la España que nos han dejado estos 40 años de régimen antinacional del 78, y empiezo a entrar en materia:
A alguno le parecerá bien que la CE se hiciera a medida de todos los enemigos de España, “había que escuchar a todos”, pues bien al menda no le hace ni puñetera gracia.
Y es que algunos de los peores males de España vienen precisamente a colación de haber escuchado a esta gente y de haber hecho del sistema político que padecemos un traje a medida para todas las familias políticas que de un modo u otro detestan la nación, y en esto entra no solo la izquierda y los separatistas… también esos falsos moderados que hoy se manifiestan en el PP y su orbita.
Una constitución no es mala per se, creo que nadie está en contra de los elementos básicos de un estado de derecho (separación de poderes, libertad… etc) pero es que la CE78 es mucho más que eso, y aprovecha este preámbulo y esta excusa para consolidar un contenido de fondo nefasto.
Por un lado, la parte orgánica de la CE garantiza las bases de un sistema tendente al bipartidismo, partitocrático y donde no hay una separación de poderes efectiva, con la que la primera excusa, la de la democracia, se desvanece, vivimos en un régimen compartido por dos mafias muy parecidas en el fondo y que han moldeado el sistema conforme a su necesidad, haciendo metástasis en todos los rincones de la vida social española y siendo a día de hoy, más duros de roer que nadie… estos eran los que cortaban el bacalao durante el proceso constituyente y lo que ha venido después no es sino la pensión vitalicia que acordaron para sí mismos.
Pero por otro lado, y esto es lo más importante, la CE es nefasta por su chorpus ideológico, por su parte dogmática (por la ideología que la inspira)… y me voy a referir a dos ejemplos muy concretos que la hacen completamente antiespañola.
-El nefasto estado de las autonomías, que ha sustituido al estado nacional y que ha propiciado la proliferación de enanos identitarios artificiales en aras de un “mejor entendimiento de la diversidad del estado español”… que gran mentira.
Ya son 40 años en los que los políticos no pueden pensar con perspectiva de país por padecer este sistema, que además acrecenta las desigualdades entre territorios, creando un régimen privilegiado para aquellos territorios especialmente conflictivos.
-La aconfesionalidad del art16, que niega la cristiandad de España y la desvincula de su historia e identidad, (y ojo a no confundirlo con la libertad religiosa), y es que podrá sonar una chorrada, pero separar a una nación de la fe que basa sus valores es un suicidio identitario y colectivo, porque creas o no en Dios, hay una parte objetiva de las religiones que es menester reivindicar desde la oficialidad del estado.
Es por todo ello, y por las mil situaciones para las que la CE nos deja desprovistos de herramientas para reaccionar alegando falsos valores como la “igualdad o la prohibición de la discriminación”… que celebrar el día de hoy es un sacrilegio.
Javi Martínez Onsalo
