Fernando Sánchez-Dragó instituye la “Cátedra Fernando López-Mirones” en los “Encuentros Eleusinos”
Escrito por el biólogo Fernando López-Mirones
Ayer, en la clausura del Encuentro Eleusino, ocurrió algo increíble y que no merezco. Fernando Sánchez Dragó tomó la palabra después de mi ponencia Retorno al Tótem, y tras unas palabras elogiosas que me da pudor repetir, instituyó lo que llamó “Cátedra Fernando López-Mirones” en los Encuentros Eleusinos, que implica que puedo acudir a todos ellos para siempre independientemente del tema que se trate.
Les aseguro a ustedes que es un honor desmesurado, a este foro han acudido escritores e intelectuales demasiado importantes como para que semejante honor se me otorgue a mí antes que a ellos; no doy crédito, pero por supuesto acepto.
A aquellos de ustedes que no simpaticen todavía con Sánchez Dragó, les invito a hacerlo, porque, además, es una de esas personas que en las distancias cortas todavía mejora más si cabe.
Su cultura es descomunal, habla de memoria citando lo que haga falta sin pensar ni dos segundos. Escuchar a sus hijos Ayanta y Akela hablar de él dice mucho de su valía personal. Un aullido.