Australia: Presionan a consejeras de lactancia materna para que asesoren a personas transgénero
Miembros de la Asociación Australiana de Lactancia Materna (ABA),uno de los principales grupos de apoyo a madres embarazadas en Australia, han denunciado que se les está obligando a ayudar a transexuales y a hombres homosexuales en cuestiones de lactancia, a pesar de no estar capacitadas para hacerlo y dejando de lado sus tareas tradicionales de asistir a las madres lactantes.
Según las denunciantes, la ABA estaría ofreciendo sus servicios a las familias LGBT y exigiendo que su personal realice asesoría a mujeres trans y hombres homosexuales en cuestiones de lactancia, según reportó Breitbart.
Los consejeros habrían expresado su preocupación de que no están capacitados y no se sienten cómodos para ofrecer apoyo a hombres o mujeres transgénero porque el servicio fue diseñado históricamente para apoyar a la madre biológica durante la lactancia.
ABA posee más de 1.100 consejeras entre sus empleados y voluntarios, las cuales han recibido una capacitación a través de 5 pequeños videos con el objetivo de poder asesorar a personas trans y hombres homosexuales en cuestiones de lactancia. Según las denunciantes los videos han desviado a las consejeras de su misión original de apoyar a las nuevas madres.
Entre los requisitos impuestos por ABA a sus empleados, se encuentra el de eliminar la diferenciación de sexo biológico para referirse a las madres al mismo tiempo que se debe dejar de entenderlas como el unico ser capaz de ofrecer lactancia.
Si bien la asociación no reconoce haber impuesto estas normativas de censura interna, Sue, una de las denunciantes, declaró que en noviembre del año pasado fueron notificadas de que “debían utilizar el lenguaje inclusivo para referirse a sus clientes”.
Al menos siete consejeras habrían sido suspendidas por la ABA tras las acusaciones de otros voluntarios por utilizar el término “madre” en el grupo de Facebook.
Sue asegura que muchos de sus colegas no se sintieron cómodos ofreciendo sus servicios cuando fueron forzadas a ofrecerlo a personas que no eran madres lactantes.
“No damos nuestro consentimiento para brindar ese apoyo. Somos expertos en lactancia materna de madre a madre y no tenemos habilidades para ayudar a afirmar a los hombres en sus intentos experimentales de amamantar”’, dijo Sue en su declaración.
Sue se mostró decepcionada con la ABA, sobre todo cuando no reconocieron estar presionando a los empleados a trabajar de determinada manera, cuando, según Sue, es evidente como los videos de capacitación “dejan claro que debemos apoyar a los hombres que llaman a la línea de ayuda nacional, que se sienten mujeres y quieren amamantar a sus recién nacidos”.
“Esto no es para lo que se formó la ABA y está en conflicto con nuestro código de ética y documentos fundacionales”, afirma.
Otra de las denunciantes, se dio a conocer como Chris, y se desempeña como consultora en lactancia y miembro desde hace mucho tiempo de la ABA. Según sus dichos, la prioridad de las consejeras ha sido siempre cooperar en el proceso de la lactancia materna entre el bebé y la madre de donde nació.
“No es el papel de las personas que apoyan a las madres asesorar a las mujeres transexuales. Su función número uno es establecer la lactancia materna con la madre biológica”, dice Chris.
Lo que se está denunciando en Australia es otro avance más de la ideología izquierdista penetrando en el concepto de familia tradicional buscando destruirlo y defendiendo la deformación de los roles impuestos por la naturaleza, como es el amamantamiento del ser humano.
En todo los ámbitos de salud públicos, no solo en Australia, se está buscando imponer el “lenguaje inclusivo” para referirse a temas clave como maternidad, paternidad, lactancia y embarazo, buscando justamente naturalizar estos ideales de ruptura con la tradición.
Sólo a modo de ejemplo, en Estados Unidos se está haciendo un gran esfuerzo por imponer la idea de reemplazar el concepto de “embarazada” por el de “persona que da a luz”.
